Pastor
Byron Sales Curiel
Frágiles vasijas de barro... Somos de barro o arcilla, como también se le conoce. Y vaya si somos frágiles! somos imperfectos, no somos confiables, cometemos errores y en muchas ocasiones los mismos errores.
Así es el hombre, así somos. Pero a pesar de todo ello un Dios todo poderoso, que nos creo, decidió amarnos y habitar en nosotros, para que manifestemos como la luz, la gloria de Dios a través de nosotros.
Pues Dios, quien dijo: "Que haya luz en la oscuridad", hizo que esta luz brille en nuestro corazón para que podamos conocer la gloria de Dios que se ve en el rostro de Jesucristo.
Ahora tenemos esta luz que brilla en nuestro corazón, pero nosotros mismos somos como frágiles vasijas de barro que contienen este gran tesoro. Esto deja bien claro que nuestro gran poder proviene de Dios, no de nosotros mismos.
Por todos lados nos presionan las dificultades, pero no nos aplastan. Estamos perplejos pero no caemos en la desesperación. Somos perseguidos pero nunca abandonados por Dios. Somos derribados, pero no destruidos. 2a. Corintios 4:6-9 NTV
El apóstol Pablo dice que más importante que nuestra condición actual [dificultades, perplejos por los apuros, perseguidos, derribados o fracasados] es más importante nuestra posición en Cristo... una posición de autoridad de dominio, de Poder que proviene de Dios.
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