Dosis de Sabiduría – 09 diciembre 2013
“Envió a sus sirvientes [la sabiduría] para que invitaran a todo el mundo. Ahora convoca desde el lugar más alto con vista a la ciudad: -Entren conmigo-, clama a los ingenuos. Y a quienes les falta buen juicio…” Proverbios 9:3-4 NTV
Es frecuente ver en la entrada de algunos restaurantes y otros establecimientos un letrero que diga: “Nos reservamos el derecho de admisión”.
La entrada es para todos, pero no para cualquiera; porque aunque el cliente tenga el deseo de consumir y capacidad de pago, los propietarios deciden quiénes pueden entrar y quienes no, por ejemplo la forma de vestir, el estado sobrio de la persona, su conducta y modales, etc.
Ser sabio no es cuestión de capacidad, sino de disposición para buscar la sabiduría.
La sabiduría está al alcance de todos, pero solo la obtienen aquellos que la buscan y estén dispuestos a pagar el precio para conseguirla.
"El reino de los cielos es como un tesoro escondido en un campo. Cuando un hombre lo descubrió, lo volvió a esconder, y lleno de alegría fue y vendió todo lo que tenía y compró ese campo" Mateo 13:44 NVI
“Ahora convoca desde el lugar más alto con vista a la ciudad”. La búsqueda de la sabiduría te lleva a altas dimensiones en la vida. Nadie puede considerarse sabio si la sabiduría no lo ha hecho crecer.
“Clama a los ingenuos. Y a quienes les falta buen juicio”. Lo importante en la vida no es dónde y cómo empieces tu carrera, sino cómo la terminas.