Ps. Byron Sales Curiel
Dosis de Sabiduría
El timón es el mecanismo que un automóvil que se encuentra en marcha, necesita para ser dirigido a tal o cual dirección. En una autopista, un vehículo no necesita de giros bruscos para cambiar de rumbo, basta con ¨pequeños¨ y sutiles giros en el timón para que luego de un tiempo, el vehículo se encuentre en otro carril o al extremo de la autopista.
¨La mujer infiel engaña con palabras suaves y dulces, que al fin de cuentas resultan más amargas que la hiel y más peligrosas que una espada. Quien se enreda con ella, va derecho a la tumba¨. Proverbios 5:3 TLA
Regularmente, la infidelidad comienza con sutiles y pequeños giros en el timón de nuestras relaciones conyugales... ¨todo empezó con un saludo¨, ¨lo (a) conocí en Facebook¨, son excusas que revelan esta verdad.
La infidelidad es engaño porque ofrece con ¨palabras suaves y dulces¨ lo que aparentemente no encuentras en casa, pero a un precio alto y con consecuencias terribles; de tal manera que terminas comprando al precio de una joya lo que es realidad es una ¨fantasía barata¨.
La persona infiel es egoísta, porque solo piensa en sí misma, en su placer y no en su familia, ni en el daño directo a su cónyuge y sus hijos.
Estás a tiempo para cambiar y enmendar el camino de tu vida y matrimonio, permite que Dios maneje tu timón, porque hay muchas cosas que Dios no aprueba y la infidelidad es una de ellas:
¨Claman: ¿Por qué el Señor no acepta mi adoración?. Les diré por qué! Porque el Señor fue testigo de los votos que tu y tu esposa hicieron cuando eran jóvenes. Pero tú le has sido infiel, aunque ella siguió siendo tu compañera fiel, la esposa con la que hiciste tus votos matrimoniales¨ Malaquías 2:14 NTV